jueves, 25 de julio de 2024

La ULL coge por costumbre "imponer" modificaciones de RPT a su personal

El orden del día del Consejo de Gobierno convocado para mañana viernes contiene dos puntos con la modificación de las Relaciones de Puestos de Trabajo (RPT) del personal técnico, de gestión y administración y servicios con el objetivo de imponerlas al no existir acuerdo con la representación legal del personal.

Estas dos modificaciones de la RPT del PTGAS (antiguo personal de administración y servicios PAS) sin acuerdo, se añaden a la aprobación en el anterior Consejo de Gobierno de otra modificación de RPT del PDI que fue impuesta, también, sin acuerdo con los representantes del profesorado. En aquella ocasión, se trató de un cambio realizado en una negociación previa sin que se avisara o volviera a negociar con la Junta de PDI ni con el Comité de Empresa del PDI laboral y casi no resultó aprobada en Consejo de Gobierno al ser evidente el despropósito de este tipo de actuaciones sin transparencia ni consenso (en la votación 18 votaron a favor de la modificación y 14 en contra).

Con la propuesta de modificación de RPT del PTGAS para mañana la Universidad de La Laguna vuelve a repetir la imposición de cambios en la estructura del personal universitario, sin atender a las razones de la representación legal de su personal. En los tres casos, las Juntas y los Comités de Empresa han dejado clara su voluntad de negociación, acuerdo y consenso. Pero el Vicerrectorado en el caso del PDI y la Gerencia en el caso del PTGAS han decidido precipitar sus imposiciones sin esperar, bajo el argumento de que "pueden hacerlo". 

Queremos recordar que desde la recuperación democrática en las universidades, las RPTs de personal (tanto PDI como PAS -ahora denominado PTGAS), siempre se han negociado y acordado por consenso. La representación sindical del personal en las Juntas y Comités de Empresa siempre han mostrado su voluntad de colaborar en el buen funcionamiento de la universidad y los distintos equipos rectorales de la ULL han apoyado ese clima de consenso porque permite afrontar las situaciones en un clima de cooperación colectiva.   

Solo en 2010 se produjo una situación similar, con la aprobación de una RPT de PAS funcionario impuesta, que fue recurrida judicialmente y provocó dos años después un acuerdo para la retirada del recurso contencioso-administrativo cuando el Rector reconoció su error y confirmó el compromiso de recuperar el consenso y la cooperación. 

Lamentablemente ahora, este equipo rectoral, ha roto la negociación y el consenso no solo con el PTGAS funcionario, sino también con el PTGAS laboral y con el PDI. Creando una dinámica totalmente contraria a la tradición democrática y participativa de nuestra universidad. Imponiendo un sistema de funcionamiento basado en la imposición  que genera desconfianza, crispación y enfrentamientos innecesarios, en momentos delicados por las restricciones presupuestarias y la puesta en marcha de la LOSU.