viernes, 5 de marzo de 2010

Prejubilaciones del profesorado de la ULL: Un mal acuerdo

El pasado martes, día 2 de marzo, el Rector firmó con los sindicatos un plan de incentivación para la jubilación voluntaria del PDI.

CCOO, que en el año 2006 presentó la primera propuesta para impulsar el derecho a la jubilación anticipada en la ULL, firmó dicho acuerdo porque cualquier iniciativa sindical precisa de la unidad de todos los sindicatos.

La semana pasada decíamos que la propuesta elaborada no recogía muchos aspectos importantes y que excluía a una parte del conjunto del profesorado. En este sentido, lamentamos que una parte de los firmantes presenten el documento como "un buen acuerdo", mas aún cuando a última hora se han añadido tres clausulas no negociadas con CCOO que condicionan e impiden su aplicación inmediata y recortan sus efectos en el futuro. La inclusión de tales clausulas ponen de manifiesto una forma de "lavarse las manos", por si el acuerdo no llega a materializarse.

Tal vez alguno de los firmantes ha pensado que lo importante era "salir en la foto" de la rueda de prensa, pero desde CCOO consideramos que lo esencial es que todo el profesorado pueda acceder en igualdad de condiciones a la jubilación voluntaria anticipada. Si esto no es así, todo lo demás habrá sido un fracaso y un engaño.

Desde el comienzo de este proceso CCOO ha presentado reiteradamente propuestas orientadas a la mejora significativa del documento, que si bien fueron asumidas inicialmente por el resto de los sindicatos, la Junta de PDI no fue capaz de defender y aceptó su recorte mansamente, sobre todo porque la última parte de la negociación ha sido llevada exclusivamente por el presidente de la Junta. No se ha aprendido nada del pasado, en que los muchos objetivos conseguidos lo fueron por la participación efectiva de todos los sindicatos.

El acuerdo firmado se fundamenta en dos tipos de jubilación. La primera modalidad es una verdadera jubilación anticipada, mientras que la segunda es más bien una jubilación parcial, ya que permite compatibilizar el cobro de la pensión con el mantenimiento de cierta actividad académica o profesional (un mecanismo que existe en la empresa privada desde hace tiempo y que el Estatuto Básico del Empleado Público ha reconocido a los que trabajamos en la Administración).

Las propuestas de mejora presentadas por CCOO para la primera modalidad de jubilación consistieron, fundamentalmente, en garantizar el 100% de las retribuciones en lugar del 95% que establece el documento. Especialmente porque ese 95% sólo recoge unos 3.000 € de los complementos autonómicos, cuando gran parte del profesorado está cobrando cantidades superiores. Más aún si, además, consideramos la primera clausula limitadora, que no garantiza siquiera esos 3.000 €. De forma que ese 95% "teórico" puede llegar a convertirse en un simple 83% real, situación que desanimaría a muchos/as compañeros/as a la hora de plantearse si opta o no por la jubilación anticipada.

Motivados por ese escaso incentivo a la jubilación "plena", CCOO presentó numerosas proposiciones de mejora a la Modalidad B, denominada "emérito-prejubilado". Modalidad de jubilación parcial que sí podría resultar atractiva.

Sin embargo, al final ha salido una opción muy limitada y restringida a unos pocos colectivos del profesorado, excluyendo a la gran mayoría, de forma que el acuerdo sobre jubilación voluntaria anticipada de la Universidad de La Laguna se sitúa como el peor de todos los firmados en las universidades españolas.

NUESTRAS PROPUESTAS DE MEJORA

Aparte de plantear el 100% de las retribuciones (en lugar del 95%) para la Modalidad A, CCOO insistió para que el acuerdo recogiera a todo el profesorado: funcionario y laboral. Sobre todo porque en un momento dado se pasó a considerar sólo a los funcionarios y, aunque al final se ha recuperado el sentido inicial de que es para todos/as, no se ha permitido que los representantes del Comité de Empresa del PDI pudiera participar de manera efectiva en todo el proceso, limitando su intervención a que en el futuro puedan incorporarse a la comisión de seguimiento, pero sin dejarles integrarse en la negociación, ni escuchar sus propuestas y sugerencias.

Pero ha sido en la Modalidad B donde hemos hecho un mayor número de propuestas de mejora:

- En el tercer párrafo del apartado 4.2, cuando se establece el "máximo de un tercio de la dedicación que corresponda a un profesor de universidad a tiempo completo", defendimos que era necesario especificar un máximo de 6 créditos para evitar problemas con el cómputo de los TEUs y Colaboradores.

- Cuando se establece el periodo de tiempo en el que se tienen que obtener los "méritos" que dan derecho a la jubilación anticipada y que lo limita a los 9 años anteriores, nosotros queríamos que se contabilizase toda la vida laboral y profesional del/a profesor/a, ya que esa limitación supone no tener en cuenta todos los esfuerzos docentes e investigadores e implica, especialmente, una minusvaloración de la docencia, justificación fundamental de nuestro trabajo.

- En ese mismo apartado, cuando se mencionan los méritos que se tendrán en cuenta, CCOO defendió que se considerasen también los tramos docentes o investigadores de los complementos y los quinquenios obtenidos. No se nos hizo caso y los méritos establecidos por el acuerdo solo son alcanzables por unos pocos (una dirección de Tesis, participación en tribunales de Tesis o en tribunales de Titularidad o Cátedra), limitando considerablemente el derecho a la jubilación voluntaria anticipada.

Finalmente, también consideramos importante que, en el apartado 5, donde se establecen los criterios de priorización en el caso de que existan más solicitudes de jubilación de las que se puedan conceder, se debería añadir el padecimiento de enfermedades graves crónicas con el mismo grado de preferencia de los/as docentes de mayor edad, ya que ambos supuestos tienen la misma o equivalente importancia.

Esperamos que la Universidad no utilice las clausulas de autolimitación para bloquear la implantación de la jubilación voluntaria anticipada del profesorado y el acuerdo no se convierta en "papel mojado".

Ver el Acuerdo original firmado con las observaciones de CCOO y las notas autolimitadoras

5 comentarios:

  1. Estimados compañeros,

    En el apartado 5, Condiciones de aplicación y renovación de la plantilla, en el punto C, se establece que:

    c) en todo caso, en la convocatoria siguiente tendrá preferencia el profesorado cuya solicitud no pudo ser atendida en la convocatoria anterior.

    Este párrafo se presta a una picaresca que puede desvirtuar la aplicación del acuerdo. Si solicitan el primer año 500 profesores la jubilación anticipada, durante los siguientes cinco años, ningún profesor que vaya cumpliendo los 60 años podrá solicitarla (bloqueando así 5 años la aplicación del acuerdo), porque hasta que no se le conceda a estos 500 profesores en convocatorias sucesivas, no podrían dársela a nadie más, en aplicación estricta del punto C.

    Si alguien me aclara que esto no puede pasar, se lo agradecería. Me temo que esta es una cláusula que no se meditó y valoró los efectos últimos de su aplicación.

    Del resto comparto buena parte de los argumentos de CCOO. Tampoco me extraña el disparate en que se convirtió esta negociación, dudo mucho que de una asamblea (sin reflexionar, analizar datos, contrastar y dejar tiempo para madurar las ideas) salga alguna conclusión brillante. Las asambleas y la reflexión inteligente son incompatibles.

    saludos,

    Aldo A. González Brito
    Departamento de Fisiología,

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  2. Aldo,

    tienes razón en lo del punto c) de los criterios de priorización. Ahora mismo hay unos 370 profesores en la ULL con al menos 60 años cumplidos y podría existir, como tu dices, un "bloqueo" durante los primeros años de aplicación del acuerdo.

    Intentaremos desde la comisión de seguimiento del acuerdo hacer una interpretación flexible de ese punto c), priorizando la edad y la antigüedad.

    Saludos,

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  3. Estimados compañeros,
    El problema quizás sea un poco más complejo de lo que aparenta. El cálculo de 370 profesores es ahora; el gobierno canario no ha ratificado aún este acuerdo; se está hablando insistentemente de retrasar la edad de jubilación; se requerirá para su viabilidad una ficha financiera en los presupuestos; el gobierno no tiene dinero y en el 2.011 hay elecciones y para colmo sería en los presupuestos de ese año electoral cuando se podría/debería presupuestar (como más pronto). Por otra parte, no se contempla el deterioro de los profesores entre los 60 y los 70. Un albañil con artrosis de cadera no puede aguantar hasta los 65 años trabajando, aunque tenga cierto deterioro cognitivo; un profesor puede trabajar con artrosis de cadera, pero no con cierto deterioro cognitivo. El % de profesores con este problema en los próximos años es impredecible, pero cuando en un departamento el 50% de los profesores estén en ese rango de edades....los demás profesores van a tener un problema serio. Esta -la salud- debió ser una prioridad básica y finalmente no se incluyó. Deterioro cognitivo leve, cierto hastío y mala adaptación a Bolonia no hay mente que lo soporte. Nuestra herramienta es el cerebro y la inteligencia. Prejubilar profesores con plena capacidad intelectual y mantener profesores con cierto deterioro y bajo rendimiento (sin opción a prejubilarse) no beneficia a nadie. ¿Que alternativa les queda, pedir la baja definitiva por enfermedad y cobrar mucho menos? No parece justo.

    Aldo González Brito
    Departamento de Fisiología

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  4. Si tantas son las dificultades y problemas del acuerdo, ¿porqué lo firmaron?

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  5. Creemos que las propuestas de mejora que proponemos no suponen ningún disparate. Son aportaciones que facilitan la extensión de este derecho a un mayor número de profesores/as y, por consiguiente, mejoran el carácter incentivador del Acuerdo. De hecho, hasta ahora, nadie ha manifestado ninguna posición contraria a estas mejoras, por lo que comprendemos aún menos las razones por las que no fueron incluidas en el documento final.

    Durante la semana previa a la firma del Acuerdo, CCOO intentó que la Junta del PDI respaldara la mayoría de estas propuestas de mejora y que fuesen trasmitidas al Rectorado. Incluso, para hacer mas presión, esa misma semana difundimos un comunicado expresando nuestra preocupación por lo limitado del Plan de prejubilaciones que se proponía. A pesar de no conseguir que se mejorase el documento a firmar, el presidente de la JPDI se dirigió a los sindicatos pidiéndoles la firma: "… Esperamos que cada organización sindical entienda la responsabilidad de dar salida a la situación a favor del profesorado en estas condiciones y en estos momentos (con la que está cayendo) y firmemos todos el acuerdo …".

    Aunque CCOO considera que este Acuerdo es muy limitado y excluye a sectores importantes del profesorado, atendiendo a la necesidad de mantener la unidad de los sindicatos y entendiendo que es preferible un mal acuerdo que ninguno, hemos decidido respaldar la firma del documento final. 

    Un saludo,

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