Recientemente ha aprobado un Plan de medidas de recorte del gasto público que, en el apartado de recursos humanos, recorta numerosos derechos al personal laboral y funcionario (de administración, servicios, sanidad o educación) de la Comunidad Autónoma de Canarias.
Destacan, por su importancia, los relativos a la suspensión de varios apartados del Convenio Colectivo, la eliminación de las ayudas de acción social (médicas, premios de jubilación y/o permanencia, etc...), la paralización del Plan de pensiones y la reorganización de la Inspección Médica a la que se dan nuevas atribuciones.
Este último apartado es especialmente grave ya que permite el uso indebido de información reservada que, incluso, podrá llegar a manos de los gestores de las Consejerías. Algo que esta expresamente prohibido porque se trata de información médica de carácter reservada.
Es de destacar que previamente existía un documento de la Consejería de la Presidencia que incluía mas recortes y que, finalmente, no se han atrevido a aplicar.
- Comparativa entre los recortes laborales previstos y los aplicados realmente.
- Extracto con la totalidad de los recortes laborales aprobados.
- Texto íntegro del acuerdo del Gobierno de Canarias publicado en el BOC.
Por eso, ahora más que nunca, debemos redoblar los esfuerzos por participar en las movilizaciones de protesta. Sólo así podremos parar estas iniciativas.
¿Cómo es esto? Cuánto más ganas te pagan la dietas, viajas en clase oro y además no tienes que preparar oposiciones.
ResponderEliminarLos pringados a opositar, a trabajar y a ser la diana perfecta para focalizar temas que deterioran su posición y esfuerzo cuando los mandatarios quieren desviar la atención de los ciudadanos.
Esto es, "QUIEN HIZO LA LEY, HIZO LA TRAMPA".
Es evidente que la poca respuesta que, los funcionarios y laborales, dimos en la Huelga de Junio les "ha envalentonado".
ResponderEliminarCreen que seguiremos apaticos y conformistas, por lo que van a seguir con nuevos recortes de forma indefinida. Sobre todo porque la prensa sigue arremetiendo contra nosotros como si fueramos los causantes de la crisis económica.
Cada uno debe decidir si quiere parar esta situación o esta dispuesto a seguir soportandola un par de años mas. Basta con apoyar y participar en las movilizaciones que se convoquen: un pequeñisimo esfuerzo que permitirá frenar futuros recortes.
De lo contrario, acostumbrate a seguir recibiendo críticas públicas y restricción de derechos.
Cierto.
ResponderEliminarCada vez cuesta más movilizarse, nos acomodamos más y esperamos que sean otros los que vayan a las manifestaciones (la tarde con los niños) para que resuelvan los problemas también nuestros (véase los profesores de secundaria). El "total, no se va a conseguir nada" es la cabecera y es bastante ridículo, pero cuántos más motivos hay menos nos movilizamos de verdad, tendemos a comparar con los tiempos de nuestros padres y parece como si hubiera interés en perder derechos, pero luego le "comemos la oreja" al compañero de trabajo con las injusticias que se producen.
Creo que no hace falta actuar como "abuelos" y recordar tiempos pasados.
ResponderEliminarEs suficiente con fijarnos en las movilizaciones de los franceses contra la reforma de las pensiones. ¡Y eso que sólo quieren subirles la edad de jubilación a los 62!
No me quiero imaginar que serían capaces de hacer si su gobierno les plantea jubilarse a los 67 años.
Aquí sale más gente a la calle cuando gana un equipo de fútbol que cuando hay una movilización convocada. Sin comentarios.
ResponderEliminarCierto.
ResponderEliminarY no se pierdan, una vez, el intento de la prensa de hundir a los empleados publicos, en
La Opinion de Tenerife, página 14.
Tiene narices la cosa, un laboral cobrando en torno a los 800 euros y encima dicen que son de los mejor pagados de España. Seguro que estos periodistas nos doblan el sueldo.
A ver si ponen que Paulino Rivero y Brito lo primero que hicieron al llegar al poder fue subirse el sueldo y la Brito cobra una auténtica barbaridad, tanto es así, que supera a la Ministra de Educación de España, con un puesto de rango inferior y evidentemente menor responsabilidad.